UNA HISTORIA SOBRE LOS JÓVENES EN INDONESIA
"CAPACITAMOS A LOS JÓVENES PARA QUE SE CONVIERTAN EN AGENTES DEL CAMBIO Y MODELOS PARA SUS PARES"
Por Muhammad Sanne, coordinador de programa, Olam Cocoa Indonesia
En Indonesia, Cocoa Life se asoció con Olam y Save the Children para capacitar a los jóvenes de las comunidades productoras de cacao de la provincia de Lampung en Sumatra. Actualmente, Cocoa Life llega a 6.500 productores del área y planea expandirse a 10.000 en 2017. La capacitación de Olam incluye habilidades agrícolas, como compostaje, gestión de viveros y prácticas de mantenimiento de granjas de cacao. Save the Children proporciona seguimiento para la capacitación sobre habilidades para la vida y habilidades comerciales. Aquí, Muhammad Sanne, coordinador de programa de Olam Cocoa Indonesia, comparte su opinión sobre el programa:
En Olam, trabajamos con Save the Children, como parte del programa Cocoa Life, para inspirar a la próxima generación de productores de cacao. Nuestro programa capacita a los jóvenes sobre las buenas prácticas agrícolas, incluso la administración de pestes y enfermedades, las técnicas de injerto, compostaje, uso de pesticidas y mantenimiento de granjas. En 2016, educamos a 249 hombres y mujeres jóvenes de 18 a 24 años.
Permítame contarle sobre una de las participantes, Putriwi Agustina. Al igual que muchas personas en Indonesia, ella se preocupa por el futuro de la producción de cacao en su pueblo. Las enfermedades y las pestes plagan muchos árboles de cacao de la zona, incluso a los de la granja de su familia. Esto condujo a una reducción de la producción y los ingresos. “Muchas personas se retiran de la producción de cacao”, dice la adolescente de 18 años que vive en Karangsari.
Luego de realizar la capacitación, Putriwi y sus padres aplicaron las prácticas que ella aprendió en su propia granja. Para evitar la propagación de una enfermedad, podó ramas de árboles. “También realicé injertos en 50 árboles, yo misma”, dice. (El injerto —insertar una rama o un brote de un árbol en otro— se usa para mejorar la calidad de las vainas y aumentar los niveles de productividad, así como su resistencia a las enfermedades).
La experiencia inspiró a Putriwi a dedicarse al cacao. Planea estudiar agricultura en la universidad e iniciar su propia granja.
"En mi comunidad, comúnmente se cree que las mujeres solo pueden hacer tareas domésticas. Pero yo creo que las mujeres podemos ser independientes"
Putriwi Agostina
Otros participantes encontraron empleo gracias a sus nuevas habilidades. Hendra Saputra, 23 años, de Kutawaringin, fue contratada para podar y realizar injertos en los viveros locales de cacao. Hendra también trabajó para rehabilitar la granja de su padre.
"Considero que esta es una buena oportunidad para mí y mis amigos. A veces los vecinos me piden consejos para mantener su granja y con gusto les doy explicaciones."
Hendra Saputra
Para mí, eso es lo más emocionante del programa Cocoa Life. Veo que los jóvenes se motivan. Aprenden habilidades que pueden usar para sus sustentos. Al mejorar las granjas de cacao —y compartir su conocimiento con sus amigos y vecinos—, generarán un impacto en sus comunidades. Capacitamos a los jóvenes para que se conviertan en agentes del cambio y modelos para sus pares.
"Antes, solo ayudaba a mis padres durante la cosecha con la recolección, el descascarado y la venta de granos de cacao. Pero ahora, gracias al programa Cocoa Life, puedo decirle a mi padre cómo cuidar y cultivar el cacao de manera apropiada. Quiero dar el ejemplo para otros productores de cacao de mi pueblo"
Risma, 18 años, participante del programa de capacitación de Cocoa Life en el pueblo Sinar Baru Timur